una noche en la opera

viernes tarde-noche, 17.30 h.
ataviados con las mejores galas (es un decir... recordad que traemos una maleta o, en el mejor de los casos, dos, con ropa para primavera, verano, otoño e invierno), aseados, afeitados, perfumados... en fin, ese tipo de cosas que se suelen hacer previo eventos ludico-festivos donde la imagen (la buena) es importante...
lo malo del asunto, pese a lucir muy buena imagen (dadas las circunstancias...), nuestros vehiculos eran manifiestamente mejorables... incluso mi super-bici, tiene el glamour de una cebolla (o menos), pero aun asi, decidimos ir con ellas... por que no? nada hay de malo...

la llegada, no fue triunfal... tipo limusina, fans, fotografos, etc... pero tampoco nosotros ibamos rompiendo moldes precisamente, de hecho, Anja, iba con unos vaqueros... ni un triste traje, ni un poco de escote, falda con abertura... kimono...
por cierto, vimos unos cuantos kimonos... pero de los caros, de los de verdad... que me he enterado que los autenticos (rechace imitaciones), los artesanales, cuestan entre 500.000 y 1.000.000 de yenes... 3.000-7.000 € de nada...

llegados al centro cultural-auditorio-biblioteca y no se que otras cosas mas... llamemoles complejo, o cosa con salas de esas... nos decidimos a entrar... aunque nos faltaba una, la coreana heywon, que llego antes con kae (las dos aparecen en el tsu-matsuri, alli, mas abajo...) para ver si en la biblioteca encontraban algo que les explicase la opera...
pasada la confusion inicial, entramos... y, como era de esperar, subimos alli donde cristo perdio el alpargate (creo que esta en el diccionario de la rae, pero si no, zapatilla) y donde solo las aguilas sanas podrian distinguir un actor de un cacho de decorado... de hecho, me sentia un poco tiranosaurio-rex o bicho de esos que solo ven si la presa se mueve... supongo que es lo que tiene el precio de estudiante... la buena noticia es que se oia estupendamente... de hecho, daba gusto oirlo...
lo curioso del asunto, es que en nuestra zona, la mas alta, las ultimas filas estaban repletas (estudiantes claro) pero las primeras, vacias del todo... no entiendo por que no fuimos alli desde el principio...

supongo que todos conoceis el primer acto de tosca, asi que no os voy a contar nada del te deum final... un poco descafeinado, para mi gusto, pero es que resulta dificil hacerlo bien... y aqui utilizaron sintetizadores... que, bueno, son eso, por muy japoneses que sean...

como en dresden, finalizado el primer acto, procure fijarme en los huecos del patio de butacas... pero llegue tarde... es que realmente estabamos muy atras... no obstante, anja y yo nos fuimos para abajo... a ver que pasaba... y paso lo que tenia que pasar... jejeje... que encontramos un sitio la mar de chulo para ver (y oir, claro) el resto de la opera...
anja consiguio ponerme nervioso, a pesar de que los sitios estaban manifiestamente desocupados... ella pensaba (tal vez con razon) que si nos equivocabamos, y su dueño legitimo aparecia y nos veia ahi, no se atreveria a echarnos... lo que yo no se es, llegado ese extremo, donde se meteria el tal japones (y acompañante), okuparia otro sitio??
esperamos a que se apagasen las luces... y cuando era evidente que no vendria nadie mas... pues ocupamos los sitios libres... justo al lado del escenario...
y alli vimos el segundo acto, anja y yo... los demas se quedaron alla arribota... en plan velociraptor... detectando movimientos... mientras oian a tosca pactando con escarpia la liberacion de cavadarosi (se escribe asi?)
por suerte, para heywon, que le echo morro (como anja y yo), hubo descanso y cambio de decorado entre el segundo y el tercer acto... y nos tuvimos que reubicar los tres... esta vez si, sabiendo donde ibamos, que ya me habia fijado yo en los huecazos libres... javier y kae se quedaron alla arriba... se ve que lo de sentirse dinosaurio les gustaba... porque ni se mudaron a las primeras filas del tercer anillo... en fin...
el tercer acto, donde se luce cavadarosi (o sea, el tenor) con su e lucevan le stelle, y donde... bueno... pasa lo que pasa... lo vimos estupendamente, a unos 15 metros del escenario... con toda la alta sociedad nipona (la de Tsu, que, digamoslo todo, no es precisamente de las mas altas...) que, sinceramente, nada tiene que envidiar a la española (o dresdiana) en cuanto a atuendo, pieles, liftings, afeites y enjuagues... igual de estirados (la piel tambien) igual de engalanados... en fin... como en casa... solo que con ojillos achinados... y algun que otro kimono...
uno de ellos me pregunto si era italiano, estuve a punto de decirle que si... pero no, español... ah! que bien, si... jejeje...
acabada la opera, me toco explicarles que habia pasado, a pesar que habia sendos subtitulos a ambos lados del escenario, que, una vez abajo, se veian inmejorablemente... cosas que pasan, supongo... lo que no me explico, es como kae pensaba que puccini, siendo que el apellido atufa a italiano a kilometros, pensaba que era un autor ruso... asi que le he sacado un libraco de la biblioteca y le he descargado la opera... y se ha quedado muy contenta... jejeje...
javier se aburrio un poco... supongo que no es lo suyo este tipo de eventos... yo me lo pase genial... viendo la obra, viendo los plumajes japoneses y sobre todo, el cambio de asiento... que nos permitio disfrutar casi en primera fila, del espectaculo...
cuando termine de aclarar el final de la opera a anja y a heywon, ya no habia nadie en la sala, y al estar tan cerca del escenario... pues casi nos colamos en el backstage... a felicitar a los actores y demas miembros (musicos y extras...), y alla que ibamos heywon y yo, pero anja se nos corto al ver a dos armarios del grupo de maquinistas hungaros (por cierto, la compañia era hungara) desmontando la escenografia... y, bueno, ya habiamos tenido bastante por esa noche... tal vez la proxima vez...
de vuelta a casa... javier se fue a cenar a casa... y las chicas y yo fuimos a cenar a casa de un greco-nipon llamado alexander... que nos habia invitado (a no se quien de nosotros, pero alla ibamos todos...) y, como nos guiaba kae, pues nos perdimos... o mejor dicho... nos llevo por el camino mas largo... a pesar de mis protestas... pero fue divertido... compramos algo para cenar, bebidas... y pasamos el resto de la noche en una autentica casa nipona... no muy lejos, por suerte, de la residencia...

creo que por hoy ya es bastante... contar que el baño, en la autentica casa nipona, es semejante a un urinario portatil, exterior... lo dejo para otro dia... pero, en invierno, debe de ser durisimo ir suelto de tripa...

perdon por el cierre... procurare no ser muy escatologico la proxima vez...